Sus ojos se tensan y me suplican; los míos inquieren y se resisten. La puerta se abre; la pregunta apura la respuesta: - Fui yo…
Mis ojos aguantan el ardor y la lágrima; los suyos me esquivan y se cierran. La luz se apaga, no hay nada más que hablar.



4 criticas constructivas:
Me hace imaginar más de una escena.
Me gustó.
Yo nunca he sido muy aficionado a este tipo de relatos. Tengo la paranoica sensación de que la pereza del escritor deja el 90 por ciento del trabajo en manos del lector. Aunque debo reconocer que como lector soy también muy perezoso.
Uno de los inconvenientes del micro es que tiene que dejar espacios para que lo construya el lector, pero eso es también uno de sus atractivos. Se rebela una relación, las interpretaciones son multiples.
es como el hermoso escrito de nata: muchos tuvimos varias interpretaciones y ella optò por no decir cuàl era el motivo verdadero (al menos para ella) que lo llevò a escribirlo, y me parece muy bien. Aunque rara vez me gusta esta forma de escribir,este no lo encuentro muy interesante que digamos!
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