La joven acaricia la superficie húmeda, algo mullida, de lo que parece una cama. Su primera emoción, al separar los parpados, es de vergüenza. “Al parecer un accidente nocturno”, piensa. Luego de un instante va tomando conciencia de la circunstancia: de los olores quirúrgicos, las luces que enceguecen, los azulejos blancos como nubes en el cielo. En ese instante lo comprende todo, de golpe: no fue un accidente nocturno; es el presente que se anuncia ominoso, con su cuerpo desmadejándose lentamente mientras espesos coágulos púrpuras emergen de su cuerpo, a la espera de la última exhalación.
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MicroMundo
3 criticas constructivas:
¡Uauuuuh! La peor pesadilla es la peor realidad. Bueno, aunque demasiado sangriento para mi gusto.
Ufff, fin de la historia... está muy bien creada la atmosfera hospitalaria y final.
Es precioso, sorprendente, lástima el final, habría que cortarlo antes para que no suene explicativo. El lector ya entendió: La palabra coágulo lo explica todo.divaling
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