Cuánta juventud perdida
en aquella noche aciaga
cuántos sueños, cuanta vida
cuánta ilusión truncada.
Cuan absurda la tragedia
hoy, cuan vanas las palabras
las preguntas sin respuestas
que se quedan en la nada.
El dolor y la impotencia
y la bronca que no acaba
y la profunda tristeza
desoladas de las almas.
Cromañón, es el lamento
semejante a una plegaria
Cromañón, y hasta el silencio
es sollozo que desgarra.
Solo digo lo que siento
con voz baja, resignada...
cuánta juventud perdida
en aquella noche aciaga.
“ EL NOMBRADOR”
3 criticas constructivas:
Bueno, para aquellos que no sean de Argentina el relato les puede parecer incomprensible. Se habla de la muerte de cerca de 200 jovenes en una discoteca llamada Cromañón porque las puertas de emergencia estaban cerradas en el momento de iniciarse el incendio. Entre otras irregularidades el lugar estaba lleno por encima de su capacidad, el material que se prendé fuego al quemarse produce cianuro... la realidad siempre es más terrible que la literatura.
Cadáver exquisito
También acá en México hace algunos años se quemó la banda juerguista e inquieta en la discoteca Lobohombo ; la fumarola ambivalente, estoy seguro, olía a almendras. Hace poco sucedió de nuevo, esta vez, más que las puertas atascadas con cadenas o inservibles por el óxido, eran los granaderos en “redada contra la corrupción de menores” quienes detenían a los escapistas preparatorianos temerosos del regaño paterno y del bote. Caso curioso, aparte de jóvenes aplanados en la turba, dos que tres justicieros vestido de azul yacían entre los masa de patrañas humanas.
Eric Ahumada
(Véase las notas en: http://www.youtube.com/watch?v=Yn6JyrQXm3w
http://www.elmundo.es/elmundo/2008/06/21/internacional/1214013218.html
)
http://es.youtube.com/watch?v=m8alCvg1tKs&feature=related
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