Y para poner fin a las habladurías que les habían perseguido, la abrazó fuertemente contra su pecho. Se fue acercando a su boca hipnotizado por el calor que le desprendían los labios hasta tenerlos tan cerca que no pudo resistirse a besárselos por primera vez, con ternura, muy despacio, después, atrapado por tanto deseo contenido.
Ella se dejó querer hasta quedarse sin fuerzas, sin aliento…
Y allí la dejó, en un rincón de la cama, como dormida, pálida, helada, envuelta en un charco de sangre.
4 criticas constructivas:
Eros y Tanatos (no me acuerdo si va con h intermedia Tanatos) el amor y la muerte siempre van ligados.
Pablo: tanatos o tanhatos, puede escribirse de cualquiera de las dos formas.
Alayda: el relato es claro, entretiene, creo que la sucesión de los hechos va a mucha velocidad para lo que estás queriendo contar
y eso no me gustó
No quise alargar su agonía...
Gracias por el apunte.
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